ALMAGRAFIA DE FEFI
CIUDAD
Alaska y Monaco
MEDIDAS
60×50 cm
DESCRIPCIÓN
El pretexto e impulso de la obra a la cual me enfrentaba, era tan bonito, complejo y a la vez tan sencillo que vi claro desde el principio el motor principal de la misma: el amor infinito y admiración de una hija por sus padres, y la fuerza de estos para superar las pruebas que a veces nos pone la vida.
El corazón es el centro de esta historia; el músculo que ha sido enfermedad y cura para Fefi; todo nace de él. Guillermo y Fefi están unidos en uno sólo y es desde el que nacen todas las historias, viajes y por supuesto Nuria.
Septiembre es el mes clave y 2017 el año en el que ella vuelve a nacer y su fuerte corazón le permite viajar a Mónaco con su hija, y a Guillermo a Alaska, retomando así una tradición anual. 2017 es el año para celebrar la vida y los nuevos caminos, ahora más unidos que nunca.
Como el cuadro lo refleja, del 2014 al 2016 son años para tachar y olvidar, ya que el futuro que les espera está lleno de ilusión, sueños por cumplir, viajes y risas, muchas risas.
De las arterias superiores del corazón nace el viaje por la Costa Azul. Un recorrido en su Fiat 500 granate a lo Thelma y Louise desde Cannes a Mónaco pasando por SaintPaul-de-Vence, las vistas desde Grande Corniche, Saint-Jean-Cap-Ferrat,Corniche Moyenne y Eze. Un camino de rosas (blancas, como a Fefi le gustan)junto a su hija, y una mariposa mágica siempre cuidando de ellas ¿será Guillermo que desde Alaska piensa en ellas?
El Hotel Fairmont de Montecarlo es el punto de partida y descanso.
A muchos kilómetros de distancia, concretamente en Yakutat (Alaska) se encuentra él junto con 4 amigos; el pescador que “pescó” a Fefi hace 44 años (y si, tambien en Septiembre) y de la que no se ha vuelto a separar. 20 días de convivencia en una cabaña al más puro estilo Doctor en Alaska.
Esa unión, coraje y sus sonrisas son las que me han guiado durante todo el proceso del cuadro.
Un ejemplo de que hay amores que pueden con todo, y te hacen mirar hacia un futuro lleno de positivismo y ganas de comerse el mundo.